En origen editado como libro de artista, Klänge, se publicó en Munich en 1912 con un tiraje limitado a las 300 copias, siendo actualmente una rareza literaria puesto que el propio Vassily Kandinsky expresó su deseo de que no volviera a reeditarse. Escrito entre 1907 y 1912, se trata de un libro de poemas acompañado en su versión original por doce xilografías a color y treinta y cinco en blanco y negro que recogen el momento de transición y gestación de las teorías de Kandinsky con respecto a la abstracción. No se trata por lo tanto de un libro teórico como De lo espiritual en el arte, sino de una aproximación desde la poesía del profundo cambio que se verificaría en pintura, un relato del movimiento que lo llevó de lo figurativo a la abstracción. 

Su título, Klänge, sonidos, hace ya referencia a la particular categoría que Kandinsky otorgó a la música con respecto a la pintura. Aquí es la palabra y su musicalidad la que construye la imagen a pesar de que ésta se pierda inevitablemente en la traducción del alemán. No se trata de poemas autónomos con respecto a la realidad, todavía la figuran de algún modo aunque esté constituida por colores que son a la vez personajes, casas, cielos o lanzas, una especie de mundo irreal que se acerca a los márgenes del sinsentido, anunciando el salto que se avecina de la frontera de lo concreto a lo abstracto. Sin poder ver las imágenes que lo acompañaban, los poemas de Klänge nos recuerdan a las primeras pinturas de Kandinsky herederas del folklore ruso. La libertad anunciada en sus páginas no pasó desapercibida a los dadaístas y algunos de los poemas publicados en Klänge fueron leídos en las sesiones del Cabaret Voltaire. 


Vassily Kandinsky, Sons, Edicions 62, Barcelona, 1990. Precio: 17€ en uniliber.com